City porteña: allanamientos de Gendarmería en la causa.
La decisión del juez en lo Penal Económico Pablo Yadarola recayó sobre el presunto jefe de la organización, Carlos Sein Atachahua Espinoza (51), y sobre sus integrantes Miguel Ángel García Ramos (47) y Carla Violeta Correa Castañeda, quienes seguirán detenidos con prisión preventiva, mientras que la hija del líder de la banda, Naddya Lebira Atachahua del Aguila (26), también fue procesada pero sin prisión preventiva.
De acuerdo al fallo de 166 páginas, el magistrado acusó a estas cuatro personas de integrar una agrupación criminal que "de manera habitual y constante desarrolló maniobras financieras de blanqueo de activos, tendientes a poner en circulación y administrar dentro del mercado local, bienes provenientes de un ilícito penal tráfico ilícito internacional de estupefacientes y contrabando de divisas, y a otorgarles apariencia de licitud".
El juez también imputó a la pareja de Atachahua y madre de Naddya, Maribel del Águila Fonseca, quien se encuentra prófuga y con pedido de captura internacional.
En su resolución, el magistrado trabó un embargo sobre bienes por 10.000 millones de pesos a Atachahua Espinoza, su hija y el contador García Ramos, y de 200 millones para Correa Castañeda.
Si bien Atachahua Espinoza, alias el "Gordo Jesús", era investigado desde principios de 2018 por operaciones con negocios inmobiliarios y playas de estacionamiento a través de distintas firmas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la pesquisa cobró impulso en septiembre de ese año cuando Guastini declaró ante la justicia federal de Lomas de Zamora como "imputado arrepentido colaborador".
De acuerdo a ese testimonio, Atachahua Espinoza "era quien traía grandes sumas de dinero, en euros, físicamente desde Europa hasta Argentina", para lo cual "lo hacía él o se valía de distintas personas que recibirían esas sumas en diferentes destinos y regresarían al país con las mismas, mediante alguna modalidad de ocultamiento en equipajes o en equipajes de mano".
De hecho, los investigadores determinaron que el primer viaje el imputado peruano lo realizó junto a Guastini, quien poseía una oficina de cambio de dinero situada en la calle Florida y Lavalle, en el microcentro porteño.
Guastini agregó que "Atachahua le manifestó que había estado cuatro años preso, que lo habían detenido en Chile y que lo habían extraditado a Perú por cargos de narcoterrorismo".
"En relación con la producción del material estupefaciente. manifestó que era llevada a cabo por la familia de la mujer de Atachahua, toda vez que eran de la zona productora de la localidad de Ayacucho en Perú, del valle productor", señaló el fallo, en el que se detalló que esta operatoria se inició en 2003.
Siempre en base a la imputación del juez, Atachahua, hasta fines de 2013, "trabajaba con Guastini, luego le deriva toda la operatoria comercial a Miguel García Ramos, quien había sido empleado de Guastini en su oficina cambiaría" de la calle Florida.
Respecto de la hija de Atachahua, el magistrado señaló que su rol "se reduciría a una actividad de prestanombres que ejerció desde su corta edad de 18 años, sin que desde allí haya tenido un efectivo control de las maniobras de reciclaje interno de los activos, más allá de que está claro que fue un personaje fundamental para que muchas de ellas puedan concretarse".
Para el magistrado, la actividad de la organización se prolongó hasta fines de octubre de 2020, cuando la Gendarmería Nacional realizó una serie de allanamientos en domicilios particulares y oficinas del microcentro porteño y detuvo a los tres principales sospechosos.
Tras esos operativos, en los que se secuestraron 360.000 dólares, 4.600.000 pesos, 10.000 euros y divisas de Brasil, Japón, Rusia y el Reino Unido, entre otros países, la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, reveló a la prensa que entre los detenidos estaba el presunto líder de una banda que había lavado 35 millones de dólares "en el curso de más de una década".
Por su parte, Atachahua se negó a declarar en su primera indagatoria aunque en una posterior ampliación presentó un escrito en el que rechazó haber formado parte de "alguna asociación criminal".
Mientras que Guastini (45), quien también era exsocio del financista Hugo Díaz (desaparecido desde 2015) fue asesinado el 28 de octubre del año pasado a la vuelta de su casa y a metros de la municipalidad de la localidad bonaerense de Quilmes, cuando circulaba en un auto importado y con una pistola Glock en la cintura, en un supuesto crimen del tipo mafioso.
El juez también imputó a la pareja de Atachahua y madre de Naddya, Maribel del Águila Fonseca, quien se encuentra prófuga y con pedido de captura internacional.
En su resolución, el magistrado trabó un embargo sobre bienes por 10.000 millones de pesos a Atachahua Espinoza, su hija y el contador García Ramos, y de 200 millones para Correa Castañeda.
Si bien Atachahua Espinoza, alias el "Gordo Jesús", era investigado desde principios de 2018 por operaciones con negocios inmobiliarios y playas de estacionamiento a través de distintas firmas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la pesquisa cobró impulso en septiembre de ese año cuando Guastini declaró ante la justicia federal de Lomas de Zamora como "imputado arrepentido colaborador".
De acuerdo a ese testimonio, Atachahua Espinoza "era quien traía grandes sumas de dinero, en euros, físicamente desde Europa hasta Argentina", para lo cual "lo hacía él o se valía de distintas personas que recibirían esas sumas en diferentes destinos y regresarían al país con las mismas, mediante alguna modalidad de ocultamiento en equipajes o en equipajes de mano".
De hecho, los investigadores determinaron que el primer viaje el imputado peruano lo realizó junto a Guastini, quien poseía una oficina de cambio de dinero situada en la calle Florida y Lavalle, en el microcentro porteño.
Guastini agregó que "Atachahua le manifestó que había estado cuatro años preso, que lo habían detenido en Chile y que lo habían extraditado a Perú por cargos de narcoterrorismo".
"En relación con la producción del material estupefaciente. manifestó que era llevada a cabo por la familia de la mujer de Atachahua, toda vez que eran de la zona productora de la localidad de Ayacucho en Perú, del valle productor", señaló el fallo, en el que se detalló que esta operatoria se inició en 2003.
Siempre en base a la imputación del juez, Atachahua, hasta fines de 2013, "trabajaba con Guastini, luego le deriva toda la operatoria comercial a Miguel García Ramos, quien había sido empleado de Guastini en su oficina cambiaría" de la calle Florida.
Respecto de la hija de Atachahua, el magistrado señaló que su rol "se reduciría a una actividad de prestanombres que ejerció desde su corta edad de 18 años, sin que desde allí haya tenido un efectivo control de las maniobras de reciclaje interno de los activos, más allá de que está claro que fue un personaje fundamental para que muchas de ellas puedan concretarse".
Para el magistrado, la actividad de la organización se prolongó hasta fines de octubre de 2020, cuando la Gendarmería Nacional realizó una serie de allanamientos en domicilios particulares y oficinas del microcentro porteño y detuvo a los tres principales sospechosos.
Tras esos operativos, en los que se secuestraron 360.000 dólares, 4.600.000 pesos, 10.000 euros y divisas de Brasil, Japón, Rusia y el Reino Unido, entre otros países, la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, reveló a la prensa que entre los detenidos estaba el presunto líder de una banda que había lavado 35 millones de dólares "en el curso de más de una década".
Por su parte, Atachahua se negó a declarar en su primera indagatoria aunque en una posterior ampliación presentó un escrito en el que rechazó haber formado parte de "alguna asociación criminal".
Mientras que Guastini (45), quien también era exsocio del financista Hugo Díaz (desaparecido desde 2015) fue asesinado el 28 de octubre del año pasado a la vuelta de su casa y a metros de la municipalidad de la localidad bonaerense de Quilmes, cuando circulaba en un auto importado y con una pistola Glock en la cintura, en un supuesto crimen del tipo mafioso.
Fuente: (Zona Sur Diario / Télam)
Mega Menu